El cortijo del monte.

   

  Esta mañana salimos a la hora fijada, el frio y algunas gotas que aparecieron nos hicieron dudar pero al final decidimos salir. Fuimos pocos pero ha sido uno de los senderos que más he disfrutado. A la entrada de la finca pasamos una malla ganadera como pudimos y alli nos topamos con unos restos arquelógicos, concretamente un acueducto, Rafael Velasco nos habló sobre el citado acueducto. La visita al cortijo no pudimos hacerla, fue una lástima. Dentro de la finca tomamos un camino que nos llevó directamente al camino de la depuradora frente a la casa de Bernabé, durante el recorrido de este tramo disfratamos de una vistas preciosas. De regreso al pueblo hizimos una parada para visitar el molino de Domeq (molino de aceite del siglo XIX). Recorrimos aproximadamente diez kilometros de dificultad baja.